Concierto de alumnos del barrio de Gracia.
Como todos los años los alumnos de música del colegio Koska de La Salut nos ofrecen un concierto en el Santuario de San José de la Montaña.
Esta noche a las 20h.
Como todos los años los alumnos de música del colegio Koska de La Salut nos ofrecen un concierto en el Santuario de San José de la Montaña.
Esta noche a las 20h.
A las 19h en el Santuario de San José de la Montaña la Congragación de Madres de Desamparados realiza un Via Crucis en la iglesia principal del Santuario. La celebración está abierta a cualquiera que desee participar.
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Sentenciado y no por un tribunal, sino por todos. Condenado por los mismos que le habían aclamado poco antes. Y El calla… Nosotros huímos de ser reprochados. Y saltamos inmediatamente…
Dame, Señor, imitarte, uniéndome a Ti por el Silencio cuando alguien me haga sufrir. Yo lo merezco. ¡Ayúdame! Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Que yo comprenda, Señor, el valor de la cruz, de mis pequeñas cruces de cada día, de mis achaques, de mis dolencias, de mi soledad.
Dame convertir en ofrenda amorosa, en reparación por mi vida y en apostolado por mis hermanos, mi cruz de cada día. Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Tú caes, Señor, para redimirme. Para ayudarme a levantarme en mis caídas diarias, cuando después de haberme propuesto ser fiel, vuelvo a reincidir en mis defectos cotidianos. ¡Ayúdame a levantarme siempre y a seguir mi camino hacia Ti! Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Haz Señor, que me encuentre al lado de tu Madre en todos los momentos de mi vida.
Con ella, apoyándome en su cariño maternal, tengo la seguridad de llegar a Ti en el último día de mi existencia. ¡Ayúdame Madre! Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Cada uno de nosotros tenemos nuestra vocación, hemos venido al mundo para algo concreto, para realizarnos de una manera particular.
¿Cuál es la mía y cómo la llevo a cabo? Pero hay algo, Señor, que es misión mía y de todos: la de ser Cirineo de los demás, la de ayudar a todos. ¿Cómo llevo adelante la realización de mi misión de Cirineo? Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Es la mujer valiente, decidida, que se acerca a Ti cuando todos te abandonan. Yo, Señor, te abandono cuando me dejo llevar por el “qué dirán”, del respeto humano, cuando no me atrevo a defender al prójimo ausente, cuando no me atrevo a replicar una broma que ridiculiza a los que tratan de acercarse a Ti.
Y en tantas otras ocasiones. Ayúdame a no dejarme llevar por el respeto humano, por el “qué dirán”. Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Caes, Señor, por segunda vez. El Via Crucis nos señala tres caídas en tu caminar hacia el Calvario. Tal vez fueran más.
Caes delante de todos… ¿Cuándo aprenderé yo a no temer el quedar mal ante los demás, por un error, por una equivocación?. ¿Cuándo aprenderé que también eso se puede convertir en ofrenda? Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Muchas veces, tendría yo que analizar la causa de mis lágrimas. Al menos, de mis pesares, de mis preocupaciones. Tal vez hay en ellos un fondo de orgullo, de amor propio mal entendido, de egoismo, de envidia.
Debería llorar por mi falta de correspondencia a tus innumerables beneficios de cada día, que me manifiestan, Señor, cuánto me quieres. Dame profunda gratitud y correspondencia a tu misericordia. Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Tercera caída. Más cerca de la Cruz. Más agotado, más falto de fuerzas. Caes desfallecido, Señor.
Yo digo que me pesan los años, que no soy el de antes, que me siento incapaz. Dame, Señor, imitarte en esta tercera caída y haz que mi desfallecimiento sea beneficioso para otros, porque te lo doy a Ti para ellos. Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Arrancan tus vestiduras, adheridas a Ti por la sangre de tus heridas. A infinita distancia de tu dolor, yo he sentido, a veces, cómo algo se arrancaba dolorosamente de mí por la pérdida de mis seres queridos.
Que yo sepa ofrecerte el recuerdo de las separaciones que me desgarraron, uniéndome a tu pasión y esforzándome en consolar a los que sufren, huyendo de mi propio egoismo. Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Señor, que yo disminuya mis limitaciones con mi esfuerzo y así pueda ayudar a mis hermanos. Y que cuando mi esfuerzo no consiga disminuirlas, me esfuerce en ofrecértelas también por ellos. Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Te adoro, mi Señor, muerto en la Cruz por Salvarme. Te adoro y beso tus llagas, las heridas de los clavos, la lanzada del costado… ¡Gracias, Señor, gracias! Has muerto por salvarme, por salvarnos.
Dame responder a tu amor con amor, cumplir tu Voluntad, trabajar por mi salvación, ayudado de tu gracia. Y dame trabajar con ahínco por la salvación de mis hermanos. Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Déjame estar a tu lado, Madre, especialmente en estos momentos de tu dolor incomparable. Déjame estar a tu lado. Más te pido: que hoy y siempre me tengas cerca de Ti y te compadezcas de mí. ¡Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía! Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te adoramos, Señor, y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo. Todo ha terminado. Pero no: después de la muerte, la Resurrección. Enséñame a ver lo que pasa, lo transitorio y pasajero, a la luz de lo que no pasa. Y que esa luz ilumine todos mis actos. Así sea. Señor, pequé, ten piedad y misericordia de mí.
Padre Nuestro, Ave María y Gloria…
Te suplico, Señor, que me concedas,
por intercesión de tu Madre la Virgen,
que cada vez que medite tu Pasión,
quede grabado en mí
con marca de actualidad constante,
lo que Tú has hecho por mí
y tus constantes beneficios.
Haz, Señor, que me acompañe,
durante toda mi vida,
un agradecimiento inmenso a tu Bondad. Amén
Como todos sabéis la Cuaresma empieza el Miércoles de Ceniza, este año es el día 18 de Febrero.
Son estas las palabras del Evangelio que recordamos el miércoles de ceniza. Se nos impone a los cristianos una cruz de ceniza en la cabeza para recordar nuestro humilde origen y final. Es la preparación para la cuaresma, un tiempo de reflexión y sacrificio para ser conscientes de nuestra condición humana, de la condición humana de Jesús y de su sacrificio.
El Real Santuario de San José de la Montaña celebrará la misa de Miércoles de Ceniza el día 18 de Febrero a las 19:30h.
Rellena el formulario siguiente y recibirás la información que solicites.
Predicación del tercer domingo de San José en la Iglesia del Real Santuario de San José de la Montaña, a cargo del P. Jesús Sanz
Muchos sois los que a través de nuestro Blog:https://santuariosanjose.wordpress.com nos estáis haciendo llegar vuestras peticiones, cartas, para dejarlas en la urna a los pies de San José y que serán quemadas el próximo día 22 de febrero, domingo josefino en el Santuario.
Recordaros que a través de nuestro facebook, por mensaje privado, twitter, o correo electrónico podéis hacernos llegar vuestras cartas con vuestras peticiones.
¡Qué lección de humildad aprendemos contemplando aquella noche de Belén! Descubrimos que la humildad es el camino, la pedagogía elegida por Dios. Desde esa humildad, José se vacía de sí mismo, confiando en que Dios lo llenará. Bienaventurados los limpios de corazón, los pobres… nos indica el Evangelio. José encarna en su vida la Buena Nueva que se nos predica este domingo.
Contemplar la figura de José es una fuente de sabiduría para nosotros. Desde nuestra situación, cada uno estamos llamados a tomar decisiones que no habíamos previsto en nuestros programas de vida. Dios hace con nuestra colaboración a sus designios mucho más de lo que nosotros podríamos pensar y esperar. Se trata de acoger la presencia del Espíritu en nuestra vida, escuchar y actuar como José.
En la primera semana de San José, cualquier momento es bueno para reflexionar sobre su figura. Os dejamos la predicación sobre el primer dolor y gozo del Padre Jesús Sanz.
Santuario en Barcelona dedicado a la devoción a San Jose y Beata Petra. Edificio modernista situado a un paso del Park Güell.
Web oficial de la devoción Josefina en Barcelona. Asociación impulsada por la Beata Petra de San José.